Esta semilla te llena de energía, estabiliza el azúcar en la sangre, ayuda a la digestión y a que tus huesos y dientes estén sanos y reduce el colesterol. Esta fuente vegetal contiene además calcio, manganeso, fósforo, mucha fibra y grasas omega 3. Y es una buena fuente de proteína, ya que no tiene colesterol.
Gracias a que contiene triptófano, que es un aminoácido esencial que requiere el cuerpo humano (que también lo contiene el pavo), ayuda a regular el apetito, el sueño y mejora el humor.
La puedes usar así como la compras o la puedes poner a remojar.
Por lo general, se pone a remojar porque así es más fácil para el cuerpo digerirla, por lo que o la remojas en agua o la remojas en leche (y haces un delicioso pudín).
Esta receta es dulce, por lo que si lo agregas a algo salado, sólo toma eso en cuenta. Si gustas prepararlo "salado", sólo remójalas en agua y listo para usarlas en aderezos, licuados, ensaladas, etc.
También puedes usar la semilla sin remojar, yo a veces se la pongo encima al yogurt con granola de mi marido y le gusta mucho.
Se me olvidaba! Estas semillas no le cambian el sabor a la comida, por lo que puedes agregarla a lo que quieras para incrementar de forma saludable tu consumo de Omega 3.
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